Protección de Variedades Vegetales

Según la OMPI (Organización Mundial de la Propiedad Industral); la protección de las obtenciones vegetales es una dimensión más de la propiedad intelectual, y como tal, es una forma de reconocer los logros de los obtentores de nuevas variedades vegetales mediante la concesión, durante un plazo limitado, de un derecho exclusivo. Para beneficiarse de protección, las obtenciones deben satisfacer una serie de criterios específicos. La Organización que se encarga de velar por la protección de las obtenciones vegetales es la UPOV, conocida así por su sigla en francés, a saber, Union internationale pour la protection des obtentions végétales.

La protección de las obtenciones vegetales tiene por finalidad salvaguardar los intereses de los obtentores como incentivo para el fitomejoramiento a los fines de la agricultura, la horticultura y la silvicultura. El fitomejoramiento es un elemento necesario y sumamente eficaz en función de los costos para aumentar la calidad de todos los tipos de plantas.

La obtención de nuevas variedades vegetales exige importantes inversiones en conocimientos técnicos, trabajo, recursos materiales, dinero y tiempo. La concesión de derechos exclusivos respecto de una obtención representa una verdadera oportunidad para que el obtentor recupere sus costos y reúna los fondos necesarios para realizar nuevas inversiones. A falta de protección de los derechos del obtentor, esas finalidades son más difíciles de alcanzar puesto que nada impide que terceras partes tomen la iniciativa de multiplicar las semillas u otro material de reproducción del obtentor y vendan la variedad en el mercado, sin prever retribución alguna para el obtentor.

En materia de registro y protección de variedades vegetales, plantas ornamentales, frutales y forestales, México ha alcanzado un importante liderazgo a nivel mundial, producto del trabajo coordinado entre las diferentes instituciones de los gobiernos Federal y Estatal y de los propios productores, afirmó el Subsecretario de Agricultura de la SAGARPA, Mariano Ruiz-Funes Macedo.

En la 43ra Sesión de los Grupos de Trabajo Técnico de la Unión Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales, Ornamentales y Frutales, se señaló que estos avances permiten a nuestro país dar certidumbre a la inversión en materia de investigación y desarrollo tecnológico. La presencia de expertos y autoridades procedentes de 15 países de los cinco continentes y tres organizaciones internacionales representa para México la oportunidad de conocer y compartir experiencias que permitan fortalecer el sistema de protección al derecho de obtentor, así como facilitar y promover la generación y transferencia de nuevas y mejores tecnologías para la competitividad del sector agrícola.

Otras naciones colaboran con nuestro país, México, cuarto país megadiverso del mundo, para elaborar guías de especies de origen mexicano como nopal, aguacate, tecojote, papaya, café, chirimoya, dalia, cempasúchil, nochebuena, tomate de cáscara y amaranto, las cuales ya fueron adoptadas como directrices armonizadas a nivel internacional para el registro de variedades, reconociendo al obtentor original.

Estos eventos especializados de alto nivel posibilita la participación de los técnicos mexicanos y todos los interesados en el tema, toda vez que se revisarán las guías técnicas para la descripción de variedades de especies de interés para nuestro país, tales como bugambilia, orquídea, cacao y pitahaya, entre muchas otras. También favorecen la capacidad técnica nacional en materia de derechos de obtentor, identificación y caracterización varietal, con el intercambio directo de ideas y experiencias con expertos de todo el mundo, participando de forma activa en el desarrollo de protocolos y metodologías, e incluso establecer acciones de colaboración y negocios futuros.

En México los antecedentes del registro de variedades datan de hace casi 50 años, cuando la Ley de Semillas creó algunas de las instituciones que hoy tenemos como el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), que es el principal obtentor de carácter público de las variedades vegetales en México.
Asimismo, el Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas (SNICS), órgano desconcentrado de la SAGARPA, al que corresponde el registro de variedades y la implementación del sistema de protección del derecho de obtentor. El Director Técnico de la Unión Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales (UPOV), Peter Button, expuso que esta organización, con sede en Suiza, la integran 67 países y fue creada por convenio internacional para la protección de obtenciones vegetales. México es país miembro desde 1997. Su objetivo, especificó, es la protección de las obtenciones vegetales por un derecho de propiedad intelectual, asegurando que sus miembros reconozcan los logros de quienes desarrollan nuevas variedades; para ello, ha establecido principios orientados a realizar exámenes de distinción, homogeneidad y estabilidad de variedades.

SEMANARIO EL AGROPECUARIO. L.A.N.I. Marisol Juárez Rueda. OCTUBRE 2010

Diferencia entre sostenibilidad y sustentabilidad

Muy de moda resultan ahora términos como sustentabilidad, calentamiento global, desarrollo regional, globalización, etc. Pero más que una moda son el resultado de las situaciones sociales que han cambiado con los momentos sociales históricos en los últimos años. Y en base a estos “momentos” o necesidades sociales se planean, replanean, diseñan y rediseñan, estrategias, programas, directrices, etc. y entonces es cuando se reconoce la importancia que tiene para nuestra vida un desarrollo orientado al mejoramiento general de las condiciones, en que se desenvuelve la vida humana. Mi autor predilecto sobre el tema en cuestión, Pajestka cita: “El proceso de desarrollo es un fenómeno social, condicionado por relaciones interhumanas y por instituciones socioeconómicas, es preciso mirarlo por un prisma especial y tener en cuenta ciertos factores al elaborar un estrategia para el desarrollo.

Entonces es como dicha estrategia debe considerar las fuerzas de desarrollo social, los objetivos de desarrollo social y las soluciones sociales e instituciones que puedan contribuir a una mayor eficiencia económica. Con más precisión, estos aspectos sociales deben constituir los elementos integrales y absolutamente indispensables de cualquier estrategia de desarrollo, particularmente esenciales para los países en desarrollo, pues en ellos los grandes cambios socio-institucionales constituyen el factor básico para modernizar su economía.” Valdría la pena preguntar en este punto ¿estas estrategias de desarrollo deben estar consideradas siempre como una estrategia de cambio socio-económico? Una nueva vertiente nos indica que no, la principal diferencia entre lo “sostenible” y lo “sustentable” radica principalmente en una diferencia; mientras que lo sostenible solo contempla los factores sociales y económicos el sustentable adopta un tercer ingrediente que es el entorno se dice que el desarrollo sustentable es la satisfacción de las necesidades presentes económicas y sociales sin comprometer los recursos de las futuras generaciones, a fin de que ellas puedan en su momento satisfacer las propias. Y esto llevado a nivel regional nos arrojan un resultado irrefutable el desarrollo con identidad no deben ir separados; por el contrario, deben ir de la mano para que se desarrolle la riqueza que ayude, luego, a vencer a la pobreza, interesante ¿no le parece? Poco a poco se van sumando ingredientes desconocidos a esta fórmula.

La Red Nacional de Experiencias Exitosas de Desarrollo Rural Sustentable (RENDRUS), en su Décimo Quinta Reunión Regional Occidente, dio a conocer los 42 proyectos que serán evaluados de acuerdo con el impacto obtenido en las comunidades y en su economía, con el fin de obtener el reconocimiento a proyecto más exitoso de 2010. RENDRUS, que es apoyada por la SAGARPA y los gobiernos estatales, evalúa los proyectos a partir de los resultados que registren en los parámetros de incremento en la producción de alimentos, generación de empleos, diversificación e identificación de nuevos nichos de mercado, innovación y valor agregado a la producción.

Durante la reunión el Director General de Servicios Profesionales para el Desarrollo Rural de la SAGARPA, José Miguel Moto del Hoyo (distinguido veracruzano), aseguró que RENDRUS se ha convertido en una importante estrategia de intercambio de conocimientos entre los productores; así como un factor de motivación y exposición de los avances que han tenido sus proyectos. Además, sostuvo que la Red es un semillero de pequeños empresarios rurales mexicanos que intercambian sus valiosas experiencias y conocimientos, con el objetivo de aprender, aplicar, replicar y segregar la información para el beneficio de los productores y sus comunidades.

Durante 2010 fueron inscritos a RENDRUS, más de mil proyectos de todo el país, de los cuales se seleccionaron 42 finalistas; el ganador será dado a conocer el 22 de octubre, en Ensenada Baja California. Los finalistas se harán acreedores a un reconocimiento, la difusión de su proyecto y con ello el acceso a apoyos. Los productores originarios de los Estados de Guanajuato, Aguascalientes, Colima, Nayarit, Jalisco, Michoacán y Querétaro dieron a conocer las estrategias productivas que han desarrollado para fortalecer sus empresas y lograr incrementar sus niveles de crecimiento y competitividad.

Algunos de los proyectos seleccionados son de lombricomposta, manejo de granjas acuícolas, hortalizas de invernadero, producción aguacatera, destilados de mezcal, salsas, mermeladas, dulces, hasta tecnología para beneficio del café, industrialización de cárnicos y producción de jabones de leche de cabra. En la reunión también participaron el Delegado Federal de la SAGARPA en Guanajuato, Francisco López Tostado, el Secretario de Desarrollo Agropecuario del Gobierno del Estado, José María Anaya Ochoa, el Subsecretario de Operación del Gobierno del Estado, Arturo Nieto Sánchez, la Directora General de Desarrollo, Ana Arévalo Ramírez, y el Presidente de la Unión Ganadera Estatal, Guillermo Reynoso.

PUBLICACION SEMANARIO EL AGROPECUARIO, L.A.N.I. Marisol Juárez Rueda. Octubre 2010.